Este libro os ofrece un análisis de las grandes corrientes de la fotografía, desde las primeras cámaras portátiles rudimentarias de la década de 1880, hasta la mitificación del «instante decisivo» a cargo de Cartier-Bresson, en la década de 1950.
La fotografía se ha convertido en el arte de masas por excelencia, objeto de fascinación para las vanguardias artísticas y lenguaje universal incontestable, y es, junto al cine, uno de los principales iconos de la modernidad.
Tras cuatro décadas de experimentación que llevaron el arte de la fotografía a todos los registros de la representación, en 1880 tiene lugar una revolución técnica: el gelatino-bromuro de plata permite pasar de la fotografía de posado a la instantánea. Una revolución que ocurre en una época que también es testimonio de los tímidos inicios del color y de la consolidación de las figuras del amateur y del reportero gráfico. Una interesante colección con un cómodo formato que aborda un gran número de temas, desde arqueología y arte pasando por cultura, historia y literatura hasta ciencia y religión, con un punto de vista ameno.