Un gigante, un oso hormiguero, o un ocelote llamado Babou no son los invitados habituales a la hora de la cena. Coge un teléfono con forma de langosta y autoinvítate a las mágicas cenas que organizaba Salvador Dalí y conocerás a Meret Oppenheim, René Magritte y a un caleidoscopio de mariposas mientras recompones, a través de las 1000 piezas de este puzle, las obras de arte del artista y el entorno que dió vida a sus surrealistas sueños.